Se te olvidó que yo sin ti no puedo vivir.

Esa sensación de felicidad cuando hablas con la persona sobre la que gira todo tu mundo, es un sentimiento indescriptible ya que no existen palabras para expresar lo que sientes.

Con un simple "hola" sientes que sonríes mirando la pantalla del ordenador, sintiéndote un poco idiota; deseando que nada ni nadie cambie esa relación de amistad tan bonita y tan perfecta que tenéis; porque llegará un día en que esa relación se acabe de la manera más inesperada.

Porque las relaciones de amistad, aunque tú quisieras que fuera algo más, se acaban deteriorando con el paso del tiempo; esa persona con la que has nacido conectada, tan conectada que las fuerzas de la química escapan a la razón; encontrará a alguien con quien compartir su vida pero nunca se olvidará de ti, porque no pasará un día sin que no se arrepienta de no haber hecho algo por intentar estar junto a ti.